Harto estaba el Sr. Corteza de que Pini y sus amigas se comieran todas las piñas. Por este motivo pensó que lo mejor sería una transformación, pero ¿cómo? si esto es imposible.
En una noche estrellada, vio pasar una estrella fugaz y rápido y véloz pensó en un deseo y dijo me gustaría ser un lilero, como el reflejo de las estrellas en el cielo.
Y zaaaaaaaaaaaaassssssssssss, esto fue lo que ocurrió
Para que luego digan que no se cumplen los deseos, jiji
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